“Una reflexión sobre ese último viaje”
Nos hemos llenado de tanto equipaje, sin embargo en ese último viaje todo se quedará...
Todos hemos escuchado o leído, quizás hasta el cansancio de lo efímero de la vida, de que nuestra mudanza es inminente por lejana que parezca. Nuestras vidas se ha poblado de ausencias que reclaman la presencia de quienes han partido y a veces cada latido, es como una punzada que duele, que desangra.
Y sin embargo, seguimos viviendo para acaparar, seguimos afanados, sin comprender que no es la cantidad sino la calidad de vida, la que al final nos hará feliz. Y que la felicidad es la sumatoria de cada uno de esos momento, sencillos y sublimes que están a nuestro alcance, que no precisamos salir a comprar.
La muerte, nos aterra, porque no hemos aprendido a convivir con la soledad, esa soledad que nos invita a reflexionar, que nos lleva a la intimidad con nosotros mismos, que nos despoja y a la vez nos llena de tanto. Esa soledad que es insoportable, porque nos evoca vacío y sin sentido, porque tenemos miedo a descubrir ese vacío, que al final nos dejan esas cosas, que hacemos para entretenernos o para pasar el rato.
Además si esa última mudanza, que llamamos muerte, fuera tan mala, porque un Creador tan amoroso, que nos a rodeado de un mundo precioso la permitiría...
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#Sobrelamuerte
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