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domingo, 28 de abril de 2024

“El sinsentido y el hastío”


 “El sin sentido y el hastío”

A veces la vida, parece tornarse en una eterna condena, como la de Sísifo, en la cual por más que nos esforzamos, los resultados no corresponden a los esfuerzos invertidos y cuando creemos alcanzar la meta, todo se desmorona y tenemos de empezar de nuevo, en un círculo vicioso que parece no terminar.

El sin sentido y el hastío, dos huéspedes que sin ser invitados, siempre se alojan en las profundidades del alma. Llegan en silencio sin avisar y de repente se meten en la mente y hacen estragos en el corazón.

Hacen preguntas difícil de contestar, que a veces solemos razonar, pero las respuestas que vienen suelen ser insatisfactorias y entonces una oleada de memorias de infortunios provocan que suba la marea y nuestra barca no encuentre puerto donde atracar; entonces los vientos del desaliento rompen las velas de la esperanza y quedamos a merced de las tempestades que ponen en peligro la  barca, salvo que “algo” o “alguien” venga a nuestro rescate.

Es allí donde la espera se vuelve apatía y el sol de la alegría oculta su rostro y el horizonte se pinta lúgubre y el sin sentido se apodera del alma, la desgarra y la deja en agonía. El hastío ha tirado el ancla y nos deja varados en alta mar sin nada que esperar.

Y sin querer estamos en un laberinto sin salida, del cual solo podrás salir cuando encontremos el verdadero sentido de nuestra vida.

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#sinsentido

martes, 9 de abril de 2024

“Esa sed del corazón”


 “Esa sed del corazón”

Lejos de esa recurrente obsesión, por poseer, el alma busca, el ser…

Porque en las latitudes del corazón, en esa profundidad inexpugnable, es como un posó infinito imposible de llenar.  Porque son infinitos sus deseos, que en nada de este mundo encuentra hartura e allí la premura, por lo que siempre andamos buscando…

Esa sed del corazón, no la sacia el vino de los placeres, ni el agua de las urgencias, pues solo puede ser saciada por ese manantial de aguas eternas y aún así, esa agua se escurre entre las manos, hasta que un día nos sumergimos en ella y nos hacemos parte de ella… La eternidad.

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#seddelcorazon

miércoles, 13 de marzo de 2024

“El poder de perdonar”


 “El poder de perdonar”

Al dar el Espíritu Santo a su apóstoles, Cristo resucitado les confirió su propio poder divino de perdonar los pecados: "Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos" (Jn 20, 22-23).

Encontrarse con una cruz y un rosario, no es algo que sucede a diario y menos en el lugar menos esperado, donde el viento sopla libremente y muchos pasan indiferentes…

Después de correr, en el parque busqué un lugar, donde meditar, donde descansar y aunque el césped aún no reverdece, me tire sobre el para ver el cielo y al bajar un poco la vista, mire esa cruz y un rosario, que “alguien” con alguna intension colocó allí, en el tronco de un árbol.

Y puede ser una casualidad o bien una “causalidad” pero en verdad, en ese momento pensaba en cuál es el poder más grande con el que Dios a dotado al hombre. La respuesta inmediata podría ser: el libre albedrío, la capacidad de amar y crear, pero al ver la cruz entendí que era la de perdonar.

Porque sin perdón no se puede amar, sin perdón la libertad es una jaula y la capacidad de crear, un regalo atrofiado…

Es por eso que el mismo Jesús en su ministerio instituyo la gracia y la misericordia sobre la ley y les dio a sus seguidores el poder de perdonar.

Porque habrá poder más grande en esta tierra, que aquel que libera, que permite la reconciliación y es el leño que arde, para que se manifieste la llama del amor…

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#elperdon