“Una cara a destiempo, pero en su perfecto momento”
Si, no es el día del padre, ni su cumpleaños, pero este es un momento espacial, en el que la vida puso en mi corazón una inmensa gratitud, que rebalsa mi corazón y no puedo más que expresarla con palabras.
Si, son unas líneas a mi viejo, el que camina por la tarde de su vida y me enseño a seguir adelante apesar de las heridas.
A mi viejo al que me vio subir peldaños, mientras que a él, le empezaban a pesar los años… El que se quedó menguando mientras yo me iba volando tras mi propia estrella.
Si, es verdad, más de alguna vez lo critiqué, pero no lo juzgue, porque había cosas que no comprendía. Cuanto se tarda uno en aprender la lección, pues hoy que soy padre también, esas cosas las he llegado a comprender.
Hoy camino también, en el atardecer de mi vida, con una eterna gratitud por lo vivido; por esa niñez y adolescencia maravillosa, que gracias a mis padres viví. Por los sueños que alcance y también por lo que no logre, porque al final, no es lo logrado y obtenido, sino lo vivido, lo que guarda el corazón.
Miguel Oswaldo D’Leon R.
#Amiviejo
#Padre
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