“Cartas en otoño”
(Rosas otoñales)
En medio de días grises, brilla el sol, así como la piel aún con cicatrices puede experimentar la ternura de una caricia…
Sabes amigo, en estos días grises a veces nos visita la nostalgia y nos invita a beber del vino del recuerdo, no para anclarnos al pasado, sino para recordarnos lo hermosa que es la vida.
Los árboles poco a poco van cambiando su color y bailan al compás del viento, ese mismo viento te despeina y caes en la cuenta que ya peinas canas y que te sobran las ganas de vivir… Y por eso me preguntó, el porqué al llegar el otoño de la vida, hay algunos que sienten que ha llegado a la decadencia, sin cobrar conciencia que los jardines en otoño también florecen.
Sabes hoy salí al jardín con los pies descalzos, sentí lo frió de la humedad de la tierra y contemplé la nueva variedad de colores y me di cuenta con que orgullo los árboles lucen sus canas.
Y eso trajo a mi esta reflexión: Si el otoño también florece y el corazón se enternece, al contemplar una flor, como se puede pensar en renunciar al amor…
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P.D. Los Rosales no renuncian a florecer, aunque el frió los hace estremecer…
#Otoño
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