“Uno se pregunta…”

“Uno se pregunta…”

Cuando uno es un niño,

no tiene conciencia del tiempo,

hasta que entra a la escuela

y le imponen horarios

y lo ponen a cumplir itinerarios.

Al hacerse adolescente,

uno totalmente demente

y con las hormonas alborotadas,

no piensa más que en crecer

y sumar unos años, para hacer

lo que le venga en gana.

Llega la juventud y uno se siente

imbatible, es un rebelde incorregible,

que piensa que se las sabe todas

y desde una cornisa la vida solo,

se sonríe.

Ahora me preguntó:

Si todo lo que he aprendido,

si todos los libros he leído,

me han servido para percatarme

de mi ignorancia, como iba yo

a saber, sino se nace con la 

lección aprendida…

Es que uno va por la vida,

pensando que será eterno,

que la juventud durará para siempre,

es uno poco consciente,

de lo poco que dura esta viaje

y uno se pregunta, para qué 

tanto equipaje.

Hoy en el otoño de mi vida,

poco o nada me importa,

la opinión de los demás 

y menos de los que vienen

detrás y aún no han descubierto

que la vida es solo un suspiró 

y el amor un gemido del alma.

Se que llegaría el día,

en que para mi, no amanecerá 

y que mi viaje habrá concluido, 

pero hasta el último 

latido quiero vivir esta

vida intensamente.

Ya tengo más pasado, 

que futuro…

Pero no seré un cadaver

prematuro…

Porque estoy seguro,

que el que me dio el ser,

tiene un propósito,

hasta mi último suspiró.

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#lavida