“El cazador...”
Vivimos como cazadores, en la selva de concreto, donde la codicia no es ningún secreto... Somos oportunista, nos da lo mismo si nos pertenece o no, porque nos ha cegado el egoísmo.
Y todavía tenemos el cinismo de quejarnos, si hace mucho frío o mucho calor, de que el clima a cambiado y que cada día se reducen las áreas verdes y en más de una canción, nos han preguntado:Dónde jugarán los niños? Y lógico ya casi no hay lugares, pero eso que importa si para eso existe la tecnología.
Vivimos en un planeta inundado de plásticos, de desperdicios, cada día más de una especie se extingue y nosotros seguimos indiferentes y como dice el Creador, quien no muestra misericordia, tampoco la alcanzará.
Todo nos da igual, total, ese no es nuestro problema, pero que pena, porque esa actitud todo lo envenena y tarde o temprano seremos presas de nuestras propias trampas y gemiremos y pedirles auxilio y los demás, al igual que un día lo hicimos, seguirán su camino indiferentes.
Hemos minado el planeta, hemos puesto trampas donde quier, para atrapar oportunidades de ganar dinero, dinero que en un planeta sin recursos no servirá de nada.
Oxwell L’bu copyrights 2019
Vivimos como cazadores, en la selva de concreto, donde la codicia no es ningún secreto... Somos oportunista, nos da lo mismo si nos pertenece o no, porque nos ha cegado el egoísmo.
Y todavía tenemos el cinismo de quejarnos, si hace mucho frío o mucho calor, de que el clima a cambiado y que cada día se reducen las áreas verdes y en más de una canción, nos han preguntado:Dónde jugarán los niños? Y lógico ya casi no hay lugares, pero eso que importa si para eso existe la tecnología.
Vivimos en un planeta inundado de plásticos, de desperdicios, cada día más de una especie se extingue y nosotros seguimos indiferentes y como dice el Creador, quien no muestra misericordia, tampoco la alcanzará.
Todo nos da igual, total, ese no es nuestro problema, pero que pena, porque esa actitud todo lo envenena y tarde o temprano seremos presas de nuestras propias trampas y gemiremos y pedirles auxilio y los demás, al igual que un día lo hicimos, seguirán su camino indiferentes.
Hemos minado el planeta, hemos puesto trampas donde quier, para atrapar oportunidades de ganar dinero, dinero que en un planeta sin recursos no servirá de nada.
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