“Ese vacío en el pecho”
Ese vacío en el pecho, que aun desangrándose por dentro y desecho no deja de latir…
Si, hay momentos en la vida en que nada cura ese herida, en que las palabras pierden sentido y cada latido es como una punzada en el corazón y no hay consuelo ante ese dolor.
Pero pasan los días y la herida empieza a cicatrizar y sigue doliendo pero de forma diferente y es la ausencia la que la hace contundente, pues hay un vacío en el pecho que con nada se consigue llenar, pues una pieza se ha perdido o ha partido.
Pero en verdad, nadie se va para siempre, porque si esa persona se lleva un pedazo de nuestro corazón, aún sin pretenderlo nos deja un pedazo del suyo; es una pieza que no parece encajar, con la que no se consigue remendar el corazón.
Pero poco a poco llega la aceptación y esta empieza a esculpir esa pieza y poco a poco la hace encajar y nos viene a demostrar que son pedacitos de esos amores, de esas presencias las que ahora laten en el pecho y aunque a veces se recienta la ausencia, hay un pedacito de su presencia que vive en nosotros.
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#ausencia
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